sábado, 19 de octubre de 2013

Huésped y Cadena epidemiológica

Cómo en una de estas entradas os hemos hablado de los 3 factores que eran imprescindibles para adiquirir una enfermedad nosocomial, os vamos a explicar un poco de cada uno de los factores.

HUÉSPED

Un huésped comprometido es aquel cuya resistencia a la infección está deteriorada a causa de una enfermedad, una terapia o una quemadura. Dos condiciones pueden comprometer al huésped y son:

  1. La ruptura de la piel.
  2. La supresión del sistema inmunitario.
La piel y las mucosas intactas representan barreras físicas que son muy buenas contra la mayoría de los patógenos. Por ejemplo las quemaduras, las heridas quirúrgicas, traumatismos, inyecciones etc pueden romper la primera línea de defensa y así aumentar la susceptibilidad de una persona a las enfermedades hospitalarias. Especialmente los pacientes quemados son muy susceptibles a las infecciones nosocomiales ya que su piel no es una barrera efectiva contra los microorganismos.

El riesgo de infección también se relaciona con otros procedimientos invasivos. Habitualmente los pacientes que requieren unos procedimientos invasivos suele ser porque tienen una enfermedad subyacente bastante grave, lo que aumenta por tanto la susceptibilidad a las infecciones. Los dispositivos invasivos proporcionan una vía para que los microorganismos del ambiente ingresen en el cuerpo, además, contribuyen a transferir microbios de una parte del cuerpo a otra. Los patógenos también pueden proliferar en los dispositivos.

 
En las personas sanas los glóbulos blancos que son llamados linfocitos T proporcionan resistencia a la enfermedad al destruir directamente los patógenos, movilizar los fagocitos y otros linfocitos y secretar unos compuestos químicos que destruyen a los gérmenes. Los glóbulos blancos que llamamos linfocitos B, que se desarrollan hasta que se convierten en células productoras de anticuerpos, también protegen contra la infección. Los anticuerpos dan inmunidad al neutralizar las toxinas, inhibir la fijación de un patógeno a las células huésped y contribuir a la rotura de los patógenos.

Por lo tanto traumatismos, quemaduras, radioterapia y diferentes tratamientos disminuyen la acción de los linfocitos T y B y por lo tanto comprometen la salud del huésped.

CADENA

Debido a la gran variedad de patógenos presentes en el hospital y al estado debilitado del huésped las vías de transmisión constituyen una preocupación constante. Las principales vías de transmisión de las infecciones nosocomiales son:
  1. La transmisión por contanto directo del personal del hospital a un paciente y entre pacientes.
  2. La transmisión por contacto indirecto a través del sistema de ventilación del hospital, es decir, transmisión por aire.
Por ejemplo elementos cómo la sonda urinaria (drenan orina desde la vejiga), catéteres intravenosos (atraviesan la piel e ingresan en una vena para proporcionar líquidos, nutrientes o medicamentos) pueden provocar o transmitir una infección nosocomial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario