Diagnóstico y posibles complicaciones de la tos ferina

En esta entrada vamos a hablar del diagnóstico y de las posibles complicaciones que pueden aparecer como consecuencia de la tos ferina, como ya comentamos en entradas previas.

DIAGNÓSTICO DE LA TOS FERINA

A veces el diagnóstico de la tos ferina no resulta nada fácil debido a que los indicios que apuntan a la existencia de la enfermedad no están lo suficientemente claros. Sin embargo, cuando ya se empiezan a manifestar los primeros síntomas el facultativo puede realizar una serie de procedimientos para saber si realmente la persona está o no infectada.

Para verificar la existencia de la tos ferina el médico recogerá una muestra de las secreciones de la nasofaringe para revelar la presencia de la bacteria (Bordetella Pertussis) y para saber dónde se ubica. Posteriormente, esta muestra se envía al laboratorio para su estudio.

Además de la muestra de las secreciones respiratorias también se realiza una analítica de sangre de la persona afectada, que muestra si hay presencia de agentes patógenos y también se puede observar el aumento del número de glóbulos blancos en el torrente circulatorio como consecuencia de la infección. Este análisis tiene que repetirse 21 días después para verificar por completo la existencia de tos ferina.

POSIBLES COMPLICACIONES

Aunque, normalmente, la mayor parte de las personas afectadas se van recuperando progresivamente de esta patología con el tratamiento adecuado, en los bebés y en los niños pequeños (menores de un año de edad) a veces se presentan serias complicaciones secundarias a la infección que pueden ocasionar su fallecimiento si no se actúa a tiempo. Algunas de las complicaciones son las siguientes:

• Contracciones violentas e involuntarias de algunas partes del cuerpo (convulsiones).
• Interrupción de la respiración (apnea).
• Daños cerebrales.
• Neumonía.
• Etc.

En adultos y jóvenes también se pueden dar ciertas complicaciones pero, en general, son mucho menos graves y casi nunca requieren hospitalización. Son las siguientes:

• Pérdida de peso.
• Incontinencia urinaria.
• Lipotimia.
• Epistaxis (sangrado por la nariz).
• Otitis del oído medio.
• Fractura de alguna costilla debido al esfuerzo ocasionado por la tos.

De todas formas estas complicaciones no se dan en todos los casos, ya que una persona puede padecer tos ferina y no verse afectada por ninguna complicación secundaria a tal infección.